El impuesto propuesto por Malasia fortalecería el mercado negro

El entusiasmo por la noticia de la semana pasada de que Malasia tiene la intención de legalizar el vapeo de nicotina se ha visto empañado por los detalles del plan del Ministerio de Finanzas. El gobierno propone una tasa impositiva tan alta que tendría importantes consecuencias no deseadas.

La tasa impositiva del e-líquido incluida en el presupuesto del gobierno para 2022 es de 1,20 ringgits de Malasia por mililitro. Un ringgit (RM) equivale a 24 centavos de dólar estadounidense, por lo que RM 1,20 equivale a $0,29/mL, tres veces el impuesto actual de RM 0,40 sobre el jugo de vape sin nicotina. El impuesto entrará en vigencia el 1 de enero de 2022, a pesar de que la ley de Malasia actualmente prohíbe las ventas de nicotina sin receta.

La tasa propuesta significaría un impuesto de RM 72 sobre una botella de 60 ml de e-líquido, o alrededor de $17. Una tasa impositiva tan alta evitaría que muchos vapeadores compren marcas legales de e-líquido y, en cambio, los obligaría a seguir comprando en el mercado negro. Además de alentar un mercado ilícito que ya está prosperando, un impuesto al vapeo tan extremo disuadiría a las personas que fuman de cambiarse al vapeo.

“Esperamos que el gobierno pueda considerar revisar la tasa impositiva que se ha establecido porque es bastante alta”, dijo el presidente de Malaysian Vape Industry Advocacy (MVIA), Rizani Zakaria, a The New Straits Times. “El aumento de impuestos hará que los productos de vapeo sean más caros que los cigarrillos de tabaco en Malasia”.

La prohibición actual de Malasia sobre la venta de líquidos que contienen nicotina es ampliamente ignorada. Según algunas estimaciones recientes, los productos ilegales representan el 80 por ciento del mercado existente. El gobierno ya impone un impuesto especial del 10 por ciento sobre los dispositivos y RM 0,40/mL sobre el jugo de vape (sin nicotina), pero la recaudación de impuestos especiales probablemente sea irregular en el mejor de los casos para los productos del mercado gris e inexistente para el e-líquido del mercado negro.

Mientras tanto, mientras las organizaciones comerciales y de consumidores de vapeo intentan persuadir al gobierno de que un impuesto excesivo no será útil para nadie, las organizaciones antivapeo en Malasia exigen que el gobierno dé marcha atrás y mantenga la prohibición actual sobre los productos de nicotina.

Una declaración conjunta emitida el 30 de octubre por 43 grupos de salud pública, médicos y de bienestar infantil insta al Parlamento de Malasia a exigir que el Ministerio de Salud reconsidere su plan. Los signatarios incluyen la Sociedad Nacional del Cáncer de Malasia, la Acción de Mujeres de Malasia para el Control del Tabaco y la Salud, la Sociedad de Farmacéuticos de Malasia y la Asociación de Salud Ambiental de Malasia.

“Esta decisión va en contra de la advertencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del año pasado de que se ha demostrado científicamente que los cigarrillos electrónicos afectan a sus usuarios”, dice el comunicado, según The New Straits Times.